
Celebrando el arte y el oficio de la cestería ancestral y sostenible.
La colección Fibras Naturales es fruto de mi curiosidad, de querer saber más, de mi pasión por hacer cosas con las manos.
Nace gracias a dos personas, una de ellas, la Roser, una señora muy cercana a mi familia, una apasionada de la naturaleza y de saber hacer cosas con las manos de manera autodidacta. Ella fue quien me despertó este interés, este deleite, por trabajar con las manos. Y su valor.
Salir a caminar con la Roser era regresar con una cestita en miniatura hecha con un junco recién cosechado, que iba haciendo mientras caminaba.

Más tarde coincidí, en un taller de mimbre, con la segunda persona inspiradora de esta colección, Joan Ferrer, quien a lo largo de estos últimos años se ha convertido en un gran referente del oficio. Con él pude crear pequeñas piezas y experimentar con otros tipos de fibras naturales.
Con la influencia de estas dos grandes personas, que han representado en mi vida el valor del arte y el oficio de la cestería, y como reconocimiento a todos los que trabajan en ello, creé esta colección.
Una colección inspirada en el arte y el oficio de la cestería y el gran universo de las fibras naturales.

La cestería es uno de los oficios más antiguos de la humanidad.
Es única y universal, ya que aparece en todas las civilizaciones alrededor del mundo y es muy rica en materiales, ya que cada cultura trabaja con las fibras que tiene a su alcance en su entorno.
En Cataluña, el arte de hacer cosas con fibras naturales como el mimbre, esparto, caña, margallo y otros tipos de materiales naturales, y la tradición, llevan a crear una cesta para cada necesidad. Hace unos años, la aparición del plástico y otras fibras sintéticas hizo que el oficio estuviera a punto de perderse.
A raíz de la crisis climática, este oficio ancestral, que se ha adaptado a las necesidades actuales, se ha convertido en un aliado indispensable para un futuro sostenible y que cada vez se está recuperando con más fuerza.